«Esta obra tiene algo que engancha al público desde el minuto uno»

Raúl González Casero
-

Las puertas del Teatro Ortega se abren esta tarde a las 20,30 y 23 horas para las representaciones de 'Taxi', una comedia protagonizada por Félix Álvarez 'Felisuco', Josema Yuste y Alfredo Cernuda

Llega a Palencia la obra de teatro Taxi. Se estrenó en marzo de este año y su éxito ha sido constante en estos meses. ¿Cuáles han sido los ingredientes de estos buenos resultados?

Como decía Bruce Springsteen, para hacer una buena canción necesitas una buena letra, una buena melodía, una buena voz, unos buenos arreglos y algo, que nadie sabe lo que es, que hace que esa canción funcione. Pues en el teatro pasa lo mismo. Hay un buen texto, una buena dirección, creo que unos buenos actores y esta obra tiene algo, que yo todavía no he descubierto qué es, que hace que se enganche el público desde el minuto uno y no le suelta hasta que nos vamos.

Es la adaptación de una obra que ya triunfó en Londres hace años

Así es. La obra lleva 30 años danzando por el mundo y creo que estuvo más de 10 años en Londres. Nosotros la hemos españolizado y se ha conseguido una maravilla de obra. Es actual y con las cuestiones de siempre a la vez.

Sin descubrir el pastel, cuéntenos a grandes rasgos los detalles de esta comedia

Es una obra en la que el público va siempre por delante del personaje. Es un taxista que está casado con dos mujeres. No es que tenga una amante sino que está casado con dos mujeres en dos pisos distintos. Como es taxista, trabaja a turnos y cuando está de mañana está con una mujer y cuando trabaja de tarde está con otra. Entonces, un día hay un accidente. Alguien intenta robar el bolso a Falete y el taxista baja a ayudarle. Le dan un golpe y aquí empieza el lío ya que a la Policía le da una dirección y en el hospital da otra dirección.

Trabaja en esta obra con compañeros como Alfredo Cernuda, Esther del Prado, Diana Lázaro y Javier Losán, pero también con un referente de la comedia como Josema Yuste, con quien es ya uña y carne

Llevamos más de siete años juntos Josema y yo y, después de Millán, soy su pareja más longeva, así que somos prácticamente familia, más si cabe en el teatro, donde estamos todo el día juntos.

Josema se estrena como director teatral. Ahora que no nos escucha, ¿qué tal se desenvuelve en esta materia?

Muy bien porque él antes que director es actor y sabe que si un director le deja a los actores la suficiente libertad, sin que se desmadren, podemos aportar nuestro granito de arena. En mi caso, más que actor me considero cómico y él siempre nos permite aportar nuestra propia cosecha. Prefiere echarnos una bronca porque nos hayamos pasado que porque nos hayamos quedado cortos, por lo que así es muy fácil trabajar.

Usted ya sabe lo que es actuar en Palencia. El pasado año estuvo precisamente con Yuste. ¿Cómo es el público palentino?

Maravilloso. Pero también te digo que depende mucho de la obra que traigas. Sí es cierto que si consigues hacer reír al público de las ciudades del norte de la Península, que somos más sobrios y recios, ya puedes ir tranquilo de gira por toda España.

Con tantas visitas a Palencia, le habrá dado tiempo a conocer la capital y la provincia. ¿Tiene predilección por algún lugar en concreto?

Tengo un par de amigos de Palencia que me llevan y me traen y no podría decirte un pueblo al que me llevan siempre a comer porque para los nombres soy muy malo, pero conozco bien la provincia. Como soy de Santander y me gustan las ciudades pequeñas y recogidas, Palencia cumple con lo que busco.

Volviendo a la obra, Taxi es la continuación de muchos años en el mundo del teatro. Pero ¿dónde se siente más cómodo: sobre las tablas de un escenario o en el mundo de la televisión, donde se ha hecho popular?

La verdad es que me gustaría combinar ambas porque el teatro te da el contacto y alegría del público y el prestigio de este género pero es que la televisión te da mucha pasta. Lo ideal sería fusionar ambas y ya, si haces una película, lo bordas.

Esta comedia, quizás tiene un toque amargo desde la muerte de Pedro Reyes. ¿Fue un duro golpe para los miembros del elenco?

Fue muy duro. La muerte siempre es puñetera pero encima cuando es así de sorpresa, porque él estaba fantásticamente bien, y con una persona que tienes siempre a tu lado pues duele mucho más. Para bien o para mal, el mundo no para de girar y hay que rehacerse. Lo que sí es verdad es que en cada función que hagamos de Taxi tendremos siempre un recuerdo especial para Pedro Reyes.

No habrá sido fácil la reestructuración de la obra cuando toca buscar a otra persona para ese mismo papel…

Al final todo fue más rápido de lo que pensamos en principio. Desgraciadamente hay mucha gente disponible ya que hay un paro tremendo. Pero la sacudida fue dura. Alfredo Cernuda se pegó un palizón e hizo un trabajo sensacional para ponerse a la altura de todos nosotros y ahora está recogiendo los frutos de todo ese curro que se pegó porque está siendo un personaje realmente divertido.

Al hablar con usted, es inevitable hacer mención al programa que marcó una época para los amantes del humor. Hace un mes se cumplieron 17 años del estreno de El Informal, del que formaba parte junto a Javier Capitán y Florentino Fernández. Ahora que han pasado 13 años de su final, ¿qué sensaciones le dejó este programa?

Lo llevamos en la mochila como un pequeño tesoro. Fueron cuatro años maravillosos. Yo pasé de ser un desconocido a no poder ir paseando por la calle. Para mi El Informal supuso todo. El vértigo de la televisión, de triunfar, de ganar dinero. Todo a la vez y muy rápido. Es parte de mi pasado y posiblemente ocupa el puesto más visible en mi memoria.

¿Cómo ve el humor televisivo en la actualidad?

Lo veo bien. El humor sigue estando ahí, aunque quizás estamos en una época excesivamente pija en cuanto al lenguaje y hay que tener mucho cuidado con lo que dices porque alguien seguro que se va a enfadar y digas lo que digas algún problema seguro que vas a tener. Estamos en un momento en el que la perversión del lenguaje, lo políticamente correcto y los eufemismos están acabando con la naturalidad del humor pero es una época en la que hay que seguir haciendo humor y en la que hay que ponerse orejeras para no escuchar las broncas de quien se moleste.

¿Tiene algún proyecto en la pequeña pantalla próximamente?

Sí que hay pero aún no se puede desvelar. De todas formas, la televisión tampoco me vuelve loco. Estoy centrado en el teatro y en mi monólogo, Apelo, del que disfruto mucho. No tengo ninguna necesidad ni ambición de volver a la tele si no es para hacer algo que me guste.

Recordamos que hoy está en el Ortega. ¿Cuáles son las próximas actuaciones?

Septiembre tiene 30 días y nosotros 25 funciones, así que no vamos a parar. Después de Palencia, estaremos 5 días en Bilbao, luego en Valladolid, Oviedo, Albacete, Las Palmas… Es más fácil que te diga los sitios donde no vamos a estar. Estamos de gira hasta septiembre de 2016, que iremos al Teatro de La Latina de Madrid. Pero bueno, hoy nos tienen en Palencia y no puede faltar nadie, porque al que no venga, le perseguiremos y le marcaremos con un hierro candente en el pecho con la J de Josema.