Cruz Roja Juventud de Palencia realizó ayer la VI Ludomarcha, un recorrido que disfrutaron niños, voluntarios y algunos padres de la asociación. Los participantes salieron ayer de los Huertos de la Tercera Edad de Cruz Roja hacia Villamuriel, donde pararon a reponer fuerzas, y al regreso pasaron el resto de la mañana descansando y divirtiéndose, hasta que les fueron a buscar sus padres, sobre las 13,30 horas. «La marcha es una actividad más que incorporamos en el programa de verano», explicó Gema Manrique, técnico de Cruz Roja Juventud. Una treintena de niños de entre 8 y 12 años, cinco voluntarios y los padres de algunos pequeños cambiaron su habitual estancia en las aulas por la marcha en bici, acompañados por los Bomberos, la Policía Local y un par de ambulancias de la Cruz Roja que fueron con ellos por precaución, puesto que no fue necesaria su utilización. Sólo se registró la rotura de una bicicleta. A las 10 horas, perfectamente equipados con sus cascos y con muchas ilusiones, los pequeños comenzaron el recorrido que les llevó desde la Dársena por el Canal de Castilla hasta la fábrica de harina de Villamuriel. A su regreso a los Huertos de la Tercera Edad de la Cruz Roja, final de la Ludomarcha, les esperaba el otro grupo de niños, formado por los más pequeños de la organización, que acude a las actividades programadas por la asociación. Los miembros de este grupo tienen entre cuatro y siete años y, mientras los mayores marchaban en bicicleta, ellos jugaban y les esperaban impacientes. Una vez reunidos, todos juntos almorzaron bocadillos de chorizo y panceta preparados por las personas que gestionan los Huertos de la Cruz Roja. Valores «Esta es una gran actividad, debido a que les inculcamos valores relacionados con el medio ambiente, la naturaleza, por eso al realizar la marcha ciclista se vincula con los deportes y el aire libre», comentó la técnico de Cruz Roja Juventud. La actividad también se puede clasificar como intergeneracionalista, puesto que al realizarse en los Huertos de la Tercera Edad de la capital, los pequeños se relacionan con los mayores. De hecho, niños y mayores se divirtieron practicando varios juegos populares como la rana o los bolos.