Como es habitual llegadas estas fechas, los grupos de teatro Cigarral y Cachivache representan el Auto del Nacimiento de Nuestro Señor, de Gómez Manrique, en el Convento de las Clarisas, en Calabazanos. Este año, son cuatro sesiones, dos ayer y dos hoy, a las 18 y 20 horas, a las que pueden asistir unas 200 personas.
La velada arranca con los Momos de la Nochebuena que firma Manuel Muñoz Hidalgo (Alcantarilla -Murcia-, 1940). Evocan la primera representación del Auto, con la presencia de Isabel la Católica, todavía infanta de Castilla, su Corte, el propio Gómez Manrique y su hermana, María Manrique, vicaria del Convento. Previamente, en el exterior, se recrea el origen del Monasterio. El Auto del Nacimiento deriva del género latino del officium pastorum. Presenta a José receloso, a María que pide a Dios que aclare las dudas de su marido, a pastores y ángeles que adoran al Niño y personajes que exponen a Jesús los instrumentos de su pasión... Ya para finalizar, llora y para calmarlo las Hermanas Clarisas interpretan el villancico titulado Callad fijo mio chiquito, bello ejemplo de los primeros villancicos medievales, escrito también por Gómez Manrique.
El Ayuntamiento de Villamuriel, la Diputación, los grupos de teatro Cigarral -de Villamuriel-, Cachivache -de Palencia- y las Hermanas Clarisas de Calabazanos redoblan sus esfuerzos para que el Auto del Nacimiento de Nuestro Señor de Gómez Manrique, joya literaria al ser el primer texto teatral escrito en castellano de autor conocido, sea declarado Fiesta de Interés Turístico Regional. Una de las principales novedades, como ya se ha señalado, es que cada día se realizan dos pases. Se completa la propuesta con un mercado artesanal en el patio del Convento, amenizado por Danzas Aldaba y el prestigioso grupo de danzas Gratia D’Amore, participante en la serie de TVE Isabel, así como por una representación que explica la historia de dicha edificación.
Señalar, por último, que no sólo la obra posee un extraordinario valor histórico y artístico, también lo tiene el marco donde se desarrolla, el Monasterio de Nuestra Señora de la Consolación, conocido como el Escorial de Adobe, fundado en 1431, y declarado monumento nacional en 1979, donde descansan los restos de Gómez Manrique.