Los vecinos de la calle María Teresa Ruiz de la Parte, ubicada en el barrio del Ave María, muy cerca de donde partirá la pasarela que salvará Los Tres Pasos, mostraron ayer su rechazo al proyecto presentado por Adif y solicitaron al Pleno del Ayuntamiento «que se paralicen los trámites hasta que se lleve a cabo una votación popular».
Una consulta ciudadana para la que estos vecinos exigen que se dé toda la información disponible «tanto del proyecto de pasarela como del paso subterráneo ya proyectado en 1999».
«Que se abra un periodo de exposición pública para que los vecinos ya contando con toda la información puedan decantarse por pasarela o por el paso subterráneo que ya estaba aprobado», aseveró Lorena Rojo, quien intervino en el pleno en representación de estos ciudadanos.
Además, exigieron conocer aspectos concretos del proyecto, como «si es necesario una modificación del Plan General de Ordenación Urbana para la ejecución del proyecto de la pasarela» o «por qué se renuncia a los 16 millones de euros que se obtendrían por la construcción de viviendas en uno de los terrenos que ocuparía la pasarela».
Lorena Rojo pidió también que se tengan en cuenta las opciones aportadas por los vecinos para trasladar la ubicación de la pasarela hacia la periferia de los barrios; y saber el motivo por el que el presupuesto pasó de los 400.000 euros a los que hizo referencia el alcalde, Alfonso Polanco, en 2013 a los cuatro millones por los que finalmente se ha licitado el proyecto.
Los vecinos acusaron al Ayuntamiento de facilitar a los vecinos información «incompleta y manipulada» con infografías «falsas» en la zona del Ave Maria. Al respecto, informaron de que existe un proyecto redactado por el Ministerio de Fomento en agosto de 1999 que ya mostraba «que no hacía falta invadir en absoluto el Parque de La Carcavilla y quedando el trazado del paso subterráneo fuera de sus terrenos». Esto es importante para los vecinos porque argumentan que la oposición de parte del barrio de San Antonio al proyecto del paso subterráneo se debe a que el Consistorio aseveró que afectaba a las zonas verdes.
El ancho de medio metro de una de las aceras de la pasarela proyectada, la ausencia de un informe medioambiental, acústico, de impacto visual, de tráfico o accesibilidad a personas discapacitadas; o el probable aumento de tráfico en la rotonda situada entre las avenidas de Asturias y Simón Nieto fueron otras de las objeciones expuestas por estos vecinos.