El Quesos Cerrato igualaba la serie de cuartos de final, en un duelo que solo duró tres cuartos (como el primero) al superar a un Ribeira Sacra Breogán que acabó desquiciado y viajará el viernes a Lugo para luchar por el pase a las semifinales.

El equipo palentino fue creciendo a medida que avanzaba el partido, con un primer periodo irregular, en el que mandó en el inicial intercambio de canastas antes de ir a remolque y con un segundo acto en el que logró atascar el ataque visitante y marcar el ritmo que le convenía en ataque para acabar mandando en el marcador al descanso.

Comenzaba el encuentro con dos equipos serios en defensa, concentrados y conscientes de la importancia del triunfo. Los locales no querían coger tan pronto las vacaciones; los visitantes esperaban disfrutar de una jornada de descanso el viernes. De ahí el 16-18 del primer parcial. Diez minutos de lucha, con el acierto repartido, por rachas, donde los gallegos hacían daño con la envergadura de Mamadou Samb y por momentos el rebote pareció un problema para los palentinos. Además, las extrañas decisiones arbitrales acababan provocando la técnica al entrenador local. Al final, 16-18.

En el segundo periodo los morados fueron entonándose en ataque, cerrando con mayor solidez el rebote. Un triple de Greg Gantt y la siguiente canasta de Quinn McDowell (que sería castigado con una técnica, igual que su rival Van Wijk, por un encontronazo) ponían tras muchos minutos por delante a los palentinos (23-22) a 6:10 del descanso. Enseguida apareció la puntería local en el lanzamiento exterior, merced al ritmo que imprimía en ataque. Los aciertos triples de Jon Cortaberría (gran defensa la suya sobre Osvaldas Matulionis), Dani Rodríguez y Roger Fornas, junto a canastas de Dani y McDowell situaban el 37-26. Reaccionó con un par de triples el Breogán para llegar al intermedio con 41-34.

En la reanudación los lucenses enjugaban la ventaja palentina en poco más de tres minutos (43-42). Durante algunos minutos las defensas estaban dominando a los ataques y el Quesos Cerrato sufría, aunque no dejó el mando del electrónico en ningún momento. Y acabó encontrando el camino del aro. Con grandes minutos de McDowell, Dani y un hasta entonces precipitado Urko Otegui, el equipo de Natxo Lekano, con una defensa fenomenal, se escapó (59-45). Y el equipo lucense se desquició y acabó tirando el partido. Sergio Sánchez tuvo que ser descalificado (lo buscó) y con los tiros libres palentinos y el triple sobre la bocina de Matulionis se cerró el periodo con el 64-49.

Al equipo palentino solo le quedaba aguantar, evitar percances, hasta el final del choque, ya casi pensando en el enfrentamiento decisivo del viernes. Tras una antideportiva por la zancadilla de Álex Llorca los locales pusieron la veintena de diferencia (75-55) aún con cinco minutos en el reloj. Los de Lezkano ganaron 81-66 y el viernes, con un atronador ambiente en contra, tratarán de acceder a semifinales.