Prevenidos contra el fuego

Rubén Abad
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La Diputación, la 'Fundación Mapfre' y la 'Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos' promueven la 'Semana de la Prevención de Incendios', que ayer llegó a la localidad norteña

Los treinta y cinco alumnos del Colegio Nuestra Señora de Areños de Velilla del Río Carrión dejaron ayer a un lado, por unas horas,  las asignaturas que habitualmente se imparten en el centro educativo para aprender una lección muy importante en su corta vida y que les servirá para saber enfrentarse a situaciones peligrosas en un futuro: prevenir incendios en sus hogares y aprender a actuar en el caso de que se encuentren ante las llamas.

Para lograrlo, durante toda la mañana se realizaron una serie de charlas informativas en el marco de la Semana de la Prevención de Incendios, una iniciativa que se celebra por segundo año consecutivo en Palencia gracias al apoyo de la Diputación Provincial, la Fundación Mapfre y la Asociación Profesional de Técnicos de Bomberos (APTB).

Con la lección bien aprendida, los alumnos de Infantil y Primaria se dirigieron al patio trasero del colegio, donde les esperaba una serie de demostraciones que corrieron a cargo de los Bomberos del Parque Comarcal de Guardo y su responsable a nivel provincial, Gerardo Abia.

Allí conocieron a fondo el camión que se utiliza habitualmente para sofocar incendios, el material y las herramientas que emplean los voluntarios de la zona y el equipamiento necesario para desarrollar su trabajo.

Asimismo, aprendieron a manejar la manguera y observaron cómo se ha de utilizar correctamente un extintor, tarea que corrió a cargo del equipo docente del centro.

«Durante toda la mañana los alumnos de las diferentes etapas educativas han aprendido varios conceptos que desconocían de antemano y que les serán muy útiles cuando sean un poco más mayores. Una idea con la que todos se han quedado es que deben llamar al 112 en el caso de que vean llamas o ante cualquier situación de riesgo», indicó la directora del Nuestra Señora de Areños, Sandra Blanco.

SIMULACRO. Cuando todo parecía que había acabado y los niños regresaron a sus respectivas aulas, comenzó un simulacro que les sacó de nuevo a todos fuera del edificio.

A partir de ese momento contemplaron el dispositivo que se pone en marcha en estos casos mientras observaban cómo salía humo de una de las ventanas del segundo piso y rescataban a una de sus maestras.