La despedida del gran Morricone

Agencias
-

El compositor de bandas sonoras más importante del mundo anuncia su retirada a los 90 años con una gira de conciertos por 10 países y una representación final el 22 de junio en Caracalla

La despedida del gran Morricone

El adiós de toda una leyenda. El compositor vivo de bandas sonoras más importante del mundo deja su batuta en el atril. Ennio Morricone, el gran músico y director de orquesta italiano, se despide a los 90 años de su carrera. Su mejor muestra como trabajador incansable será una serie de conciertos por 10 países. El célebre músico, en plena forma, comenzará con dos actuaciones en la Arena de Verona, el 18 y 19 de mayo, para concluir en las Termas Romanas de Caracalla, los días 15, 16, 18, 19, 21 y 22 de junio con una representación final.

«Me siento privilegiado de poder festejar mi 90 cumpleaños con esta salud. Es una bendición poder dirigir aún mis conciertos en tantas ciudades europeas maravillosas y estoy muy contento con la generosidad que mi público sigue demostrándome», afirmó el genio.

Sus últimas apariciones las hará en Italia, su país natal, y tal es la expectación que sigue levantando entre su público que anunció dos representaciones más en la misma ubicación en la que realizará su despedida. Las entradas para los conciertos se agotaron a los pocos días de ponerse a la venta, y por ello el maestro decidió dar otra oportunidad a sus admiradores.

Además de Roma y Verona, hará paradas en Polonia, Alemania, Hungría, Dinamarca, la República Checa, Suecia, Noruega, Bélgica e Irlanda, en un recorrido europeo que comenzó a principios de 2019. El sprint final del gran compositor de música para películas es parte de la gira 60 Años de música, que inició en 2016 y que ya ha incluido más de 50 conciertos en 35 ciudades continentales a los que han asistido más de 650.000 personas.

Autor de más de 500 bandas sonoras, y con una extraordinaria carrera que le hizo merecedor de un Oscar honorario y otro por la composición para Los odiosos ocho, el ministro de Cultura transalpino, Alberto Bonisoli, le felicitó recientemente por su 90 cumpleaños por una aportación que calificó de «obras maestras capaces de contagiar y conquistar a todas las generaciones».

Aunque comenzó a componer en la década de 1950, la fama mundial le llegó con sus temas para las cintas de su amigo Sergio Leone. Para el rey del spaghetti western, Morricone compuso bandas de títulos memorables como Por un puñado de dólares (1964), El bueno, el feo y el malo (1966), Hasta que llegó su hora (1968) o ¡Agáchate maldito! (1971). Ha hecho bandas sonoras para centenares de películas de multitud de géneros, lo que le ha convertido en uno de los autores más versátiles y reconocidos del mundo. Algunas de sus aportaciones más célebres son las composiciones para la cinta Cinema Paradiso (1988), de Tornatore; la obra maestra de Bernardo Bertolucci, Novecento (1976), o la historia de aquel misionero jesuita de La misión (1986).

Ha trabajado también con afamados realizadores como Brian de Palma, Lina Wertmuller, Roman Polanski, Warren Beatty, Oliver Stone o los españoles Luis Buñuel, en Leonor (1975), y Pedro Almodóvar, en Átame (1990).

En 2016 Morricone se hizo con el Premio Óscar por la banda sonora que creó para el filme del oeste Los odiosos ocho (2015) de Quentin Tarantino, una composición que le valdría otros reconocimientos como un Globo de Oro o el Bafta de la Academia Británica. La pasión de Tarantino por el maestro italiano es de sobra conocida y tal es así que reutilizó algunas de sus melodías en películas como Kill Bill (2003), Malditos bastardos (2009) o Django desencadenado (2012) con aquel lírico Ancora qui.

Su extraordinaria carrera fue reconocida en 2007 con el Óscar a la carrera, ampliando así un enorme palmarés en el que constan tres Grammy, cuatro Globos de Oro y un León de Oro honorífico otorgado por la Mostra de Venecia en 1995, además de 27 discos de oro y siete de platino.

Ese mismo año recibió el homenaje del mundo de la canción con la publicación del disco tributo We all love Ennio Morricone, en el que versionaron sus temas estrellas como Celine Dion, Bruce Springsteen, Metallica, Quincy Jones o Roger Waters, de Pink Floyd.

Por esto y más, se trata del más grande y relevante compositor de bandas sonoras de la Historia del séptimo arte.