C.A.J.C., de 27 años y nacionalidad costarricense, negó ayer en la Audiencia Provincial en su comparecencia como procesado que abusara sexualmente de una menor de 16 años, delito del que es acusado por la Fiscalía y por la acusación particular.
En su declaración, corroboró que invitó a la joven y a su amiga a tomar un refresco pero incidió en que no mantuvo ningún tipo de relación sexual con la víctima.
Mientras tanto, el fiscal elevó a definitivas sus conclusiones provisionales y volvió a pedir para el procesado nueve años y seis meses de cárcel así como la prohibición de acercarse a la víctima por cinco años y una indemnización de 10.000 euros como presunto autor de un delito de abuso sexual.
Mientras, la defensa solicitó la libre absolución para su patrocinado con el argumento de que el testimonio de la víctima carecía de credibilidad.
Asimismo, la acusación particular ejercida por el abogado palentino Jaime Esquete pide la misma pena que solicita el fiscal o, alternativamente, ocho años de cárcel como autor de un delito de agresión sexual.
Durante el juicio también compareció la amiga de la víctima y la exesposa del acusado en calidad de testigos, mientras que el informe elaborado por el equipo psicosocial no concreta si las imputaciones efectuadas por la víctima son veraces, según informaron a este periódico fuentes del proceso.
Los hechos, que fueron juzgados ayer y que quedaron vistos para sentencia, se remontan a las 18,00 horas del 7 de octubre de 2017, cuando según el escrito de acusación de la Fiscalía, el procesado «guiado por un deseo libidinoso» y aprovechando que se encontraba acompañado de una menor de edad que a su vez estaba en compañía de una amiga también menor de edad, logró que ambas fueran a su domicilio.
Una vez en el interior, mientras una de ellas se quedó cuidando de dos hijos menores del procesado, se introdujo en el interior de otra dependencia con la otra menor, donde supuestamente realizaron actos de carácter sexual con acceso carnal por vía vaginal sin usar preservativo.