Médico de profesión lleva desarrollando décadas su labor en Tierra de Campos. En 2011 asumió la subdelegación del Gobierno por 7 meses y ahora regresa al cargo.

¿Fue una sorpresa que le nombraran para este puesto?

Sorpresa relativa, nunca sabes en cada situación lo que puede venir. Mostré mi disposición.

¿Qué fue más sorpresa, su nombramiento o todos los acontecimientos que mediaron antes para el cambio de Gobierno?

Si me preguntas hace mes y medio si iba a estar aquí, te diría que no. Aquello fue una sorpresa absoluta. Hubo una moción en el Parlamento y salió un nuevo gobierno dirigido por Pedro Sánchez. Hay que montar una estructura de gobierno rápidamente y te ves metido en esa dinámica.

Hace 6 años ocupó este despacho. ¿Qué ha cambiado en Palencia?

En mi vida personal no mucho. He estado bien, me siento un privilegiado por tener el trabajo para el que estudié  (médico) y  un sueldo aceptable con todos los pesares que podamos tener los funcionarios. Pero si tengo que valorar lo que ha pasado con lo que me cuentan los sindicatos, el personal, los directores de servicio... la situación de la administración está un poco fastidiada. Todo son demandas del tipo hay poco personal; somos muy mayores; los sueldos son bajos, necesitamos, necesitamos, necesitamos... Palencia es una provincia pequeña y cuesta traer personal de grupos directivos. Con las próximas jubilaciones, me temo que habrá problemas. Estamos deseando traer personal, que las cosas mejoren, se contrate más y suban los sueldos. Que esa ilusión que hay en el país llegue a la administración.

En estos 6 años su experiencia política ha crecido: ha sido subdelegado y también concejal. ¿En qué ayuda al volver a este despacho?

Cuando entras en este puesto adquieres una unión con todo lo que significa el Estado, y las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad. Algo que no se quita nunca. Sobre todo me pasa con Policía y Guardia Civil. Automáticamente, comienzas a preocuparte por lo que ocurre, porque los ves de otra manera. Te queda ese poso. Cuando vuelves  aquí es como una nueva inmersión. Como tirarse a la piscina con un poquito de vértigo, pero solo un poquito, porque aquellos siete meses te dan un conocimiento de lo que es el funcionamiento de la Subdelegación. Pero siempre va ha haber cosas nuevas.

Durante su toma de posesión hubo un tema en el que incidió bastante: la despoblación

Hablé de todo. La despoblación es un objetivo político en la provincia; la seguridad es una función y obligación mía general. Sobre lo local tienes que hablar de despoblación, te guste o no te guste. No es que pusiera unos temas por encima de otros. El 70% del trabajo del subdelegado tiene que ver con la seguridad.

Pero planteó la búsqueda de una solución para la despoblación

Por supuesto. Soy palentino, trabajo en Tierra de Campos, terriblemente afectada por el problema. Si no soy sensible es que no tengo corazón y que no soy consciente de lo que pasa: perdemos cada año prácticamente 1.000 habitantes. Es algo triste, en el medio rural. Veo muy difícil revertirlo. La demografía dice lo que dice, y salvo que consigamos asentar población joven que va a tener familia y trabajo, será complicado.

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