Ni vencedores ni vencidos

David del Olmo
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El CDPalencia y el Danisa Cristo firmaban tablas (1-1) en un intenso duelo de rivalidad palentina ayer en una Balastera que parecía de otra época gracias al gran aspecto que presentaba su graderío.

Un choque donde cada uno usó sus armas, soso en su primera mitad, más animado en la segunda parte, donde llegaron los goles de Aitor y Duántez y en la que los dos pudieron ganar (con más presencia en el área rival los locales; pero los primeros en marcar fueron los visitantes) y también perder, por lo que ambos se llevaron el sabor agridulce tras el pitido final de un Diego Calvo Antolín notable en su arbitraje.

Salía presionando muy arriba el Cristo, tratando de obligar al Dépor a jugar en largo, impidiendo que sacara jugada la pelota. La ausencia de última hora de Iván Pelayo se hacía notar desde el comienzo. Con Durántez como compañero de Cabezudo en el doble pivote, al equipo morado (el local, ya que el Cristo jugó con camiseta fucsia y pantalón azul) tuvo grandes dificultades en esa parcela durante todo el encuentro.

Fue una labor de desgaste visitante, que parecía encontrarse más cómodo sobre el terreno de juego, con la excepción de los lances a balón parado, en los que el Deportivo creaba situaciones de peligro con cada córner sacado.

Sin embargo, ya durante el primer tiempo el CD Palencia era el equipo que obligaba a su rival a poner mayor atención en su portería. Sin llegar a exigir a Montero, pero el balón estuvo más tiempo en su área que en la de Carmona. Lo más peligroso, el cabezazo de Durántez (al que su entrenador le pedía una y otra vez que se incorporara al ataque para aprovechar su capacidad de llegada) en un saque de esquina de Morant en el 9’. En el otro extremo del campo, a los 40 minutos Niche (que regresaba tras un par de semanas ausente por lesión) disparaba desde fuera del área, raso, con mucha intención. Ninguno encontró portería.

Inició el segundo acto apretando de nuevo el Cristo, aunque enseguida el Dépor le mostró sus garras en el juego de estrategia. Pese a todo, no sería hasta los 20 minutos, y en una acción de contraataque, donde el equipo de Álvarez Tomé tendría la clara oportunidad de inaugurar el marcador. Adri, apoyándose en Torres (al que cerró los huecos muy bien la zaga rival con el apoyo de Calleja), llegó a la línea de fondo y centró para que Morant empujara, pero este tocó al centro, donde estaba el portero.

Y fue en los últimos 25 minutos, con la aparición del cansancio, los jugadores de refresco y los espacios, cuando llegaron los goles y uno y otro conjunto tuvieron lla posibilidad de ganar el encuentro. Se adelantó el Cristo en un disparo de Aitor donde no estuvo fino Carmona. Igualó en el barullo de un córner Durántez y su equipo achuchó en la recta final, pero Montero estuvo muy seguro por arriba y por abajo.