Expertos para valiosas piezas

ICAL
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La Diócesis contrata a diez restauradores en paro que devolverán su esplendor a obras deterioradas y de gran valor artístico gracias a la Diputación

El obispo, Esteban Escudero; el presidente de la Diputación, José María Hernández, y la restauradora, Pilar Pablos Casas. - Foto: Bragimo/ICAL

La de Palencia es una de las Diócesis con mayor patrimonio de la Iglesia de toda España y sus obras se cuentan por cientos. José Luis Calvo, delegado diocesano de Patrimonio, recuerda que la Diócesis llegó a abarcar desde los Picos de Europa hasta Medina del Campo y afirma que hasta en los pueblos más pequeños se encuentran obras extraordinarias como es el Cristo de Alejo de Vahía que cuelga de la iglesia de Santa María del Castillo de Cervera de Pisuerga. Pero proporcional a la cantidad de piezas es la necesidad de cuidados y restauración de este inmenso patrimonio, una ardua y delicada tarea que hasta ahora se venía realizando en solitario en el taller diocesano ubicado en el Palacio Episcopal pero que ahora cuenta con un apoyo.

Desde el 25 de septiembre y gracias a un convenio firmado entre el obispo de Palencia, Esteban Escudero, y el presidente de la Diputación, José María Hernández, diez restauradores en situación de desempleo y de probada experiencia trabajan en el arreglo de piezas clasificadas como de gran valor y que precisan una urgente actuación.

Pilar Pablo Casas, restauradora jefe de este grupo de expertos, muestra su satisfacción por tener entre sus manos el retablo de mayor de la iglesia de Quitanilla de la Cueza, una auténtica joya sobre la que trabajará para que pueda recuperar su antiguo esplendor. Pablo Casas explica que el taller está dividido en dos áreas. Por un lado, la dedicada a la restauración de pintura y escultura en la que trabajan ocho profesionales que se desarrolla en el Seminario Menor de San Juan de Ávila y, por otro, la que aborda el arreglo de tejidos con dos restauradores que tiene lugar en la Escuela de Arte Mariano Timón.

La coordinadora del taller también se muestra contenta porque esta es una oportunidad para una profesión que está pasando por un mal momento. «La restauración como es algo que no es una necesidad es de lo primero en que se deja de invertir, aunque para el mantenimiento del patrimonio sea fundamental».

De momento, señala Calvo, se está interviniendo en un total de diez piezas y aún está por determinar el número sobre las que se actuará durante toda la vigencia del convenio, que se prolongará hasta el 28 de septiembre de 2015.

Cuantas más, mejor. «La idea es que cuantas más mejor porque son muchas las necesidades, pero depende del tiempo que se tarde en actuar en cada obra, que puede variar desde unos días hasta semanas», explica.

Es el propio Calvo junto al jefe del Servicio de Cultura de la Diputación, Rafael Martínez, quienes seleccionan las piezas para su restauración siguiendo criterios de valor, urgencia y que procedan de todos los puntos de la provincia.

Además del retablo mayor de la iglesia de Quintanilla de la Cueza, se trabaja en la restauración de otras seis tablas con pintura al óleo del siglo XVI, un sagrario de la parroquia del Salvador de Monzón de Campos, un Cristo gótico del siglo XIV de la parroquia de San Pedro Apóstol de Itero de la Vega, un relieve en madera policromada del retablo mayor de la parroquia de San Vicente Mártir de Revilla de Campos, un manto de la Virgen del Valle (Saldaña) y una alfombra del siglo XVIII de la Catedral de Palencia.

En los próximos días se iniciará además la restauración de otras tres piezas: Cristo gótico de la parroquia de San Pelayo de Salinas del siglo XIV, una capa pluvial del siglo XVI, de la parroquia de San Juan Bautista de Palenzuela; y Santa Teresa de Jesús.

Una vez finalizado el taller, todas las obras restauradas serán objeto de una exposición en la capilla de la Cofradía Sacramental de San Miguel con el objetivo de que «la gente pueda admirar estas obras de arte, el trabajo realizado y se conciencie del gran valor patrimonial que tiene la provincia y de la necesidad de mantenerlo», indicó Calvo.

La Diputación de Palencia ha contribuido para la contratación de los diez restauradores con 180.000 euros.