Las trece leyendas de Valdeswood

E. M.
-

La ilustración del italiano Renato Casaro, basada en la obra 'La Última Cena' de Leonardo da Vinci ha servido de inspiración a los vecinos de Valdespina para recrear su propia versión artística. Muchas horas de exposición de ideas, preparativos

La pintura de Leonardo da Vinci que recrea la Última Cena de Jesucristo y sus apóstoles es una de las obras de arte a las que más referencia se ha hecho, desde que se concluyera en 1498 sobre la pared del refectorio del convento dominico de Santa María delle Grazie en Milán. Han sido muchos los homenajes que, con más o menos acierto, se han realizado con este magnífico fresco como base.

Ya lo hizo Luis Buñuel en Viridiana y después series televisivas como The Simpsons, House o Lost. Pero una de las más celebres visiones de este cuadro es la que ofreció el ilustrador italiano Renato Casaro en las Doce Leyendas de Hollywood. Ha sido precisamente esta versión la que ha inspirado a los vecinos de Valdespina para recrear su propia obra de arte en Una cena de cine, labor que ha hecho a la localidad merecedora del premio de la XII edición del concurso Mi pueblo es el mejor, organizado por Diario Palentino, con el patrocinio de Supermercados Gadis y la Diputación, así como la colaboración de La 8 Palencia.

«Siempre buscamos sacar lo mejor de nosotros mismos para hacer una fotografía diferente, con una idea original y que tenga un enfoque singular», apunta Raúl Díez Guerra, que en esta ocasión ha sido el responsable del planteamiento. «Llevaba años con este proyecto en mente y cuando presentamos las propuestas me pareció que este era el año para llevar a cabo esta representación», explica.

Tras las oportunas votaciones, «pues nosotros todas las ideas que se proponen las sometemos a votación», finalmente se optó por representar a los grandes personajes de  Hollywood haciendo referencia a la Última Cena del pintor italiano. «Desde ese momento apostamos fuerte por esta recreación y todo el pueblo se entregó para aportar ideas», comentan los vecinos, que no dudaron en hacer un casting para ver quién debía representar cada uno de los trece personajes que aparecen en esta interpretación tan original.

«Algunos los tuvimos claros desde el primer momento, pero en otros casos nos costó más ver quién se adaptaba mejor a determinados papeles. Incluso a alguno tuvimos que convencerle para que aceptara ser uno de los protagonistas de la imagen», cuentan.

Así, al final los papeles se repartieron entre Óscar y Cuma (El Gordo y el Flaco), Mario (Elvis Presley), Raúl (Clark Gable), David (John Wayne), Jesús (Charles Chaplin), Chari (Marilyn Monroe), Alonso (James Dean), David (Humphrey Bogart), Alberto (Fred Astaire), Daniel (Superman), Víctor (Groucho Marx) y Emilio (Frankenstein).

Los preparativos para realizar la instantánea comenzaron a finales de julio y la foto se tomó a mediados de agosto. En esas semanas, todos los vecinos se pusieron manos a la obra para encontrar el vestuario adecuado, probar maquillajes, realizar pruebas de peluquería o buscar el elemento clave para determinadas caracterizaciones.

«Lo mejor que tenemos es que cuando se da el visto bueno a una idea, todo el mundo apuesta por ella», aseguran desde Valdespina.

resultado. Los soportales del bar de la localidad fueron el escenario elegido para la recreación de la escena cinematográfica, momento en el que todo el pueblo estaba presente. «Lo que se ve en la instantánea es el resultado de un gran trabajo en el que participó el municipio entero. Detrás de la cámara estaban decenas de personas que, de una u otra manera, colaboraron para que el resultado fuera el mejor posible», argumentan.

La responsable final de la fotografía fue Laura Quirce Quijada, que sea encargó de encuadrar, poner luz y acertar con la imagen que ha hecho, por cuarta vez, que esta localidad se merezca el máximo galardón de este concurso. El hecho de que Valdespina presente un trabajo de calidad a este certamen se basa, en gran parte, en esa colaboración que prestan todos los vecinos del municipio. De ahí que en la foto aparezcan representantes de distintas generaciones, cada uno de los cuales se ha esforzado por interiorzar su personaje y conocer sus características, con la intención de acertar en los gestos, las poses o la mirada.

«Cada uno ha recreado su personaje y ha intentado ponerse en su piel para que fuera lo más fiel posible a la realidad», destacan los ganadores de Mi pueblo es el mejor, que ya están pensando en la idea del año que viene.

«Son gente maravillosa. Solo hace falta pedirles algo, que inmediatamente se ponen a ello y se animan», asegura Emilio Díez, concejal de la localidad. «Este concurso es un reto para los vecinos, pues durante semanas preparan y dan forma a la idea para sorprender y demostrar que, en los pueblos pequeños, hay mucha vida», añade.

Valdespina, que tiene actualmente 95 habitantes censados de los que apenas una cuarentena vive allí, ha demostrado un año más que el esfuerzo tiene su recompensa y que, contrariamente a lo que este año han representado con su instantánea, este concurso les permitirá seguir cenando juntos y apostar por engrandecer el municipio.