Una campaña dura para sacudir a la sociedad

SPC
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La Dirección General de Tráfico (DGT) pregunta al espectador quién quiere ser, si quien vive o quien muere tras un accidente

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha regresado a la línea dura en sus campañas de concienciación con una nueva propuesta en la que pregunta al espectador quién quiere ser, si «quien vive o quien muere» tras un accidente mortal. El objetivo de la campaña es «sacudir» a la sociedad. 

 Como en anteriores anuncios, la DGT muestra el después de un siniestro en carretera en la vida de las víctimas y sus familias, pero lo novedoso de esta, de nombre #VivoMuerto, es que también refleja las consecuencias en la vida de quien lo ha causado. 

El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, presentó la nueva estrategia junto al director de la DGT, Pere Navarro. Según sus palabras, esta nueva y «arriesgada» campaña, que puede «herir sensibilidades y recibir críticas», sirve de preámbulo de los cambios normativos que se irán produciendo en los próximos meses para intentar reducir la siniestralidad, y que nace como respuesta al aumento de los fallecidos. 

«Queremos sacudir a la sociedad, ponerle frente a una realidad terrible», reconoce el titular de Interior, que afirma que para esta ocasión el Gobierno ha preferido «arriesgar en prevención» con la «esperanza» de que sirva para concienciar a la sociedad para concienciar de que «por un mensaje de móvil o una última copa no merece jugarse la vida». 

 Así, Interior apuesta con Vivo o Muerto por «cambiar el enfoque», situando al espectador ante una disyuntiva que le lleva a reflexionar sobre que, «independientemente de la opción en la que uno se posicione, verse implicado en un accidente tiene consecuencias fatales». 

También Pere Navarro valora la nueva propuesta de la DGT: «Se me pone la piel de gallina, pero la realidad es más dura que la propia campaña, hay que llamar la atención y despertar a la ciudadanía cuando las cosas van mal». 

Por su parte, para el fiscal de sala coordinador de Seguridad Vial, Bartolomé Vargas, refleja ese «dolor irreparable» que se produce cuando hay un siniestro vial, en el que «cada una de las víctimas tiene un valor incalculable». «Todo ese dolor y dureza pueden evitarse con educación, concienciación y aplicación de la ley», y considera que la sociedad se debe movilizar. 

«Llevamos 30 años de campañas, algunas de ellas durísimas. ¿Quién no recuerda Las imprudencias se pagan, de principios de 90, cuando superábamos los 5.000 fallecidos anuales?», precisa el ministro, quien considera que la labor de concienciación en aquella época tuvo resultados claros, una tendencia descendente que «se ha invertido en los últimos años. 

 De hecho, advierte de que «en 2018 los resultados no van a ser mucho mejores», después de que en los últimos cuatro años hayan aumentado los muertos, lo que obliga al Gobierno a «dar un giro» en la Seguridad Vial, con políticas activas y cambios legislativos. 

móvil, alcohol o velocidad. La campaña, diseñada por las asociaciones de víctimas, arranca preguntando a la audiencia quién prefiere ser, si la víctima o el causante de un accidente, es decir, si «quien vive o quien muere». En los spots, una voz en off acompaña a las imágenes que muestran los pasos que siguen a una muerte o a una supervivencia tras un siniestro ocasionado por el uso del móvil, el alcohol o el exceso de velocidad. 

Además de la campaña en sí, que podrá verse en medios nacionales y autonómicos y en todo tipo de canales (televisión, radio, cine, redes sociales y prensa), se ha diseñado un site (www.vivoomuerto.dgt.es), en la que el usuario puede ver las consecuencias que tienen los comportamientos que suponen los motivos principales de accidentes al volante.