El 2016 fue un año en el que lo meteorológico marcó varios récords, no solo a nivel general, sino también en distintas etapas y estaciones.Por ejemplo, se podría pensar que 2016 fue una anualidad seca. Nada más lejos de la realidad, si lo que computa es el año completo. Durante 2016 se registraron en el Observatorio de Carralobo de Astudillo, 455 litros por metro cuadrado. Es verdad que no es una cantidad fuera de lo normal por exceso, y menos si se compara con los 700 y hasta los 800 litros que Mariano Bustillo recogió en los años 1997 y 1960 respectivamente, pero no es nada despreciable.