La clave de bóveda del próximo acuerdo presupuestario será la puesta en marcha de los 25 proyectos comprometidos por Polanco con Ciudadanos. El primer edil tiene de su parte la ejecución de los planes de pavimentación y asfaltado, dotados con 1,5 millones de euros. Otro de los compromisos cumplidos es la puesta en marcha de una línea de ayudas dotada con 50.000 euros para titulares de viviendas o comunidades de propietarios que ejecuten obras para la mejora de la eficiencia energética; así como la celebración de la Feria de Adopciones de Animales y el mantenimiento de la aportación municipal a la Fundación Díaz-Caneja (71.300 euros).

Sin concluir pero en marcha está también la ampliación del aparcamiento de la estación de Pequeña Velocidad, para la que hay un compromiso de inversión de 350.000 euros y un proyecto. El Ayuntamiento sigue pendiente de que Adif dé su visto bueno al nuevo convenio de arrendamiento para llevar a cabo las obras.

La reparación de las juntas del embaldosado de la calle Mayor ya se ha adjudicado a Somex Servicios por 65.000 euros; y hace unos días se han sacado los pliegos para contratar a dos topógrafos que desarrollen el programa Digipal. También está en marcha la redacción del plan director para el Lecrác, aunque está lejos todavía de su desarrollo y la contratación de un gestor cultural.

Estos proyectos suponen más de la mitad de los 2,78 millones de euros comprometidos, pero también es cierto que en los 15 proyectos restantes no hay avances hasta ahora. El equipo de Gobierno ya ha explicado que la rehabilitación de la nave de la estación de Pequeña está a la espera porque un particular se ha interesado por llevar a cabo allí un proyecto, pero tampoco hay noticias del acondicionamiento de la entrada al campus de La Yutera (50.000 euros), del desdoblamiento de la avenida Comunidad Europea (50.000); o de los 150.000 euros para que los comercios realicen obras de accesibilidad.

Sin embargo, son los incumplimientos vinculados al desarrollo económico de la ciudad los que anulan cualquier ánimo de negociar en Ciudadanos. Ninguno de los siete puntos que acordaron con el PP son una realidad, ni la colaboración con la UVa en I+D+i ni el desarrollo de un espacio de trabajo colaborativo (coworking) ni el desarrollo del plan tecnológico agroalimentario.

Ciudadanos considera «esencial» este paquete de medidas, ya que desde que entró en el Ayuntamiento se marcó como objetivo sacar adelante una batería de iniciativas vinculadas al «desarrollo empresarial, turístico, cultural y de infraestructuras en la ciudad». «Nuestras propuestas para los presupuestos ya están formuladas, presentadas y firmadas. Propuestas pensadas para mejorar la ciudad», alega. Solo si hay avances podrá haber acuerdo. Ese es el mensaje de la formación naranja.

otras vías. Si el acuerdo con Ciudadanos se presenta complicado, para el regidor y su equipo será casi imposible recabar un gesto -y no digamos ya el apoyo- de los otros dos grupos de la oposición. Desde la bancada socialista, su portavoz, Miriam Andrés, deja claro que «en ningún caso dará un voto favorable» a su propuesta. «El PP perdió nuestra confianza el primer año, cuando el consenso que alcanzamos se quebró por completo cuando no cumplieron nada», asevera la portavoz socialista.

«Haremos nuestro trabajo, pero no habrá voto favorable porque no nos fiamos», sentencia Miriam Andrés, que, sin querer desvelar demasiado, asegura que exigirán un millón de euros para acometer la primera fase del plan director de los cerros del Cristo; y al menos 50.000 euros para un programa de huertos ecológicos en el colegio de Huérfanas de Ferroviarios. También confirma que solicitarán un plan municipal de empleo y que apostarán por una partida para que los colectivos vecinales puedan poner en marcha una programación de actividades infanto-juveniles.

Por su parte, Ganemos ha sido el primero en mostrar sus cartas y la semana pasada presentó su propuesta para el presupuesto del próximo año. Puestas una detrás de otra, suman cuatro millones de euros, siendo su apuesta estrella una dotación de 2.000.000 euros para la confección de un «plan de trabajo garantizado para desempleados».

500.000 euros para el proyecto de soterramiento del ferrocarril, otro medio millón de euros para obras decididas de forma participativa por vecinos o elevar en 281.000 euros la financiación del servicio de ayuda a domicilio, son otras exigencias de la plataforma ciudadana.

Peticiones que se acompañan, además, de la exigencia de abrir un proceso de presupuesto participativo en todas las áreas «para que la gente se involucre en desarrollar las políticas municipales», especificó su portavoz Juan Gascón. Una exigencia que el equipo de Gobierno ya contempla a través del desarrollo de una aplicación financiada por el Edusi, pero que difícilmente estará lista en el plazo de tres meses marcado por Ganemos.